Como una inauguración más de esos departamentitos que se re-re-entregan cientos de veces cada vez que se acercan las elecciones, fue finalmente el canal estatal, desmintiendo a la agencia de noticias también estatal, el que ESTRENÓ el video de la fiestita, anteponiendose al mismísimo Netflix o a Paramount Plas.

Lo interesante de todo esto es que la próxima semana, Marcelo D´alessandro, el abogado de la health coach Stefanía Dominguez, ex ,ella, entre otros, de Riquelme, demostrará que LOS DECRETOS DE LOS ENCIERROS DE LA PANDEMIA ERAN INCONSTITUCIONALES y que su clienta, también letrada, Stefanía Dominguez, no cometió ningún delito.

Personalmente coincido con el abogado, los decretos era ilegales, los encierros fueron ilegales, es decir que entonces TIO ALBERTO tampoco cometió ningún delito en esa festichola tan regada, que SE PODÍA SALIR LIBREMENTE COMO NUESTRA CONSTITUCIÓN NACIONAL ASÍ LO DECLARA, y que NOSOTROS FUIMOS UNOS REVERENDOS PELOTUDOS, CON EL PERDÓN DE LA EXPRESIÓN, POR HABERNOS QUEDADO MÁS DE UN AÑO ENCERRADOS EN EL CONFINAMIENTO MÁS EXTENSO DEL PLANETA

Los que pensaron que viajaban ilegalmente tipo Midnight Express a sus trabajos, saltando vallas y andenes en Constitución, hicieron todo eso al pedo, podrían haber viajado si el telefonito y hasta APIÑADOS COMO GANADO, como se viaja siempre en esos medios de transportes públicos tan pero tan asquerosos.

Los que no abrimos nuestras oficinas y perdimos el sesenta por ciento de nuestros clientes e ingresos, los que cerraron sus negocios, los peluqueros que nos dejaron porras selváticas, al pedo hicieron todo eso.

Hicieron también muy bien el adiestrador de Dylan y el mismo Dylan en salir a buscar los palitos a la calle, palitos de pesos no, no sean mal pensados, palitos esos que el adiestrador tira y Dylan, obedientemente como TIO A LA SEÑORA, recoge; LA CONSTITUCIÓN FESTEJA NUESTRAS LIBERTADES INDIVIDUALES.

El video está lindo, la vedette posa y se mueve muy sugestivamente ante la cámara, lástima las fraperas, yo en vez de Chandon hubiera puesto al menos una botellita de Dom Perignon.

Y para despedirme ILEGALMENTE esta semana, los remonto a mi columna PRECISAMENTE DE JULIO 2020, “LA OLA ESTÁ DE FIESTA”


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