En un encuentro con la prensa local, Hein repasó la experiencia y destacó la importancia de la planificación junto a su entrenador Sebastián Montero: “Desde principio de año nos planteamos este objetivo, obviamente con mucho entrenamiento y mucho trabajo en equipo con mi familia y con mi entrenador. Creo que esa fue la clave para todo”.

La joven subrayó además el impacto de su paso por el Panamericano Junior de Asunción, que la potenció rumbo al Mundial: “El Panamericano fue la puerta. Empezamos a tener mucha confianza en nosotros, logramos tiempos que hacía mucho no podíamos bajar y el hecho de estar en una delegación tan grande también nos ayudó”.

Hein ya piensa en lo que viene. La próxima semana competirá en la "Copa España", a fines de septiembre en el Sudamericano de Río de Janeiro y cerrará el año en el Nacional de Parque Roca. Y no se olvidó de los afectos que la acompañan en el camino: “Se lo dedico a mi mamá, a mi papá, a mi familia, a mi novio, a Sebas y a su familia que también se la bancan en todo”.

Por su parte, Montero —también entrenador de la Selección Argentina— valoró la preparación previa: “Durante dos meses empezamos a implementar en los entrenamientos el sistema de competencia, tanto en Paraguay como en el Mundial. Eso nos ayudó mucho porque cuando llegamos no fue una novedad trabajar fuerte a la mañana y fuerte a la tarde”.

Y agregó: “Manejar la ansiedad, los nervios y el afuera fue clave. En la parte deportiva estábamos tranquilos y confiados, así que lo disfrutamos”.

Con apenas 17 años, Agostina Hein sigue construyendo una carrera que ya es una promesa real del deporte argentino.