La joven campanense Priscila Sand, quien denunció haber sido secuestrada, abusada y amenazada durante casi dos años por su expareja en México, volvió a alzar la voz con un pedido desesperado otra vez en un video a través de sus redes sociales: poder regresar a la Argentina junto a su hijo.

“Hace meses estoy atrapada en un proceso judicial que no termina, esperando que me autoricen salir del país con mi bebé”, escribió en un nuevo mensaje difundido. "No estoy pidiendo un favor, estoy pidiendo algo que debería ser un derecho: poder volver a mi país, con mi familia, a empezar de nuevo”.

La justicia mexicana ya le otorgó la tenencia del niño, un paso considerado clave en su lucha legal. Sin embargo, aún no se le permite salir del país. Priscila enfrenta una contradenuncia por “sustracción de menores”, presentada por su agresor antes de ser detenido, lo que activó una alerta internacional sobre el pequeño y mantiene bloqueado su regreso a casa.

Desde un lugar reservado, donde permanece oculta. Priscila asegura que la espera es angustiante e injustificada. “Ya no puedo más con esta espera que no tiene sentido. No soy un expediente, soy una mamá que solo quiere proteger a su hijo y darle la oportunidad de crecer libre de todo esto”, expresó.

La historia de Priscila comenzó a conocerse a principios de este año, cuando publicó un estremecedor video en redes sociales en el que denunció las condiciones inhumanas que vivió durante su relación con su ex. Un empresario mexicano con presuntos vínculos con sectores del poder y de la mafia. Pero a pesar de su detención, el drama judicial de Priscila no terminó. La contradenuncia en su contra sigue impidiéndole retornar a la Argentina, y su familia continúa recibiendo amenazas desde que se hizo pública la causa.