Tras una jornada de calor agobiante, una tormenta intensa con fuertes vientos, y que incluyó caída de granizo en varias zonas, sacudió ayer por la tarde a buena parte de la zona Norte de la Provincia.

En nuestra Ciudad, el viento tuvo más protagonismo que la lluvia. Tumbó árboles y postes de luz y teléfono, dejando a gran parte de la ciudad sin el primero de los servicios. Incluso, en las calles Zárate y Ugartemendia, en el Barrio San Cayetano, el techo de chapa de una vivienda se desprendió por la misma y “aterrizó” a metros del lugar, afortunadamente sin dañar a nadie en el camino.

Por acción del viento, hubo otras caídas de árboles en varios barrios. Pero sin dudas el mayor inconveniente fue la falta de energía eléctrica, que debido al calor, tiene su repercusión inmediata en la falta de agua, por la detención de los sistemas de bombeo. Fuentes de Defensa Civil aseguraron que promediando la medianoche, todavía un 30% de la Ciudad no había recuperado el servicio energético.

Precisamente desde el organismo civil se trabajó intensamente asistiendo diversas circunstancias que ponían en riesgo a los vecinos, como la remoción de cableado que quedó colgado o cortado sobre los techos o en la vía pública. Asimismo, asistieron con un generador a un vecino ligado a un respirador artificial en su domicilio.

La buena noticia es que no hubo que lamentar heridos. Además, el servicio meteorológico anticipa buen tiempo al menos hasta el fin de semana, donde podrían presentarse algunas nubes, aunque todavía la probabilidad de lluvias es baja.