Una historia tan absurda como real, que nace de una decisión equivocada y termina mal, aunque no de la manera en que podría haber culminado.

Todo comenzó en el Bº Santa Florentina, donde un sujeto en moto se ofrecía para cortar el pasto en busca de ganarse algún dinero. Al llegar a una vivienda de la calle De Los Trabajadores, fue atendido por la dueña de casa, quien dijo no estar interesada en el servicio.

No obstante, el sujeto comenzó a insistirle en la necesidad de colaborar con su situación, debido a que tenía que alimentar a su familia. En ese contexto, ofreció venderle dos teléfonos celulares a muy buen precio. Sin darse cuenta lo que realmente hacía, y pensando solamente en la oportunidad, la mujer accedió.

El hijo de la señora, un joven de 18 años, se trasladó con el misterioso sujeto a bordo de una moto hasta el Bº San Cayetano, seguido de cerca por su madre quien iba en auto. Pero al llegar al barrio, el supuesto “jardinero” escapó con el muchacho y se perdió en el interior del barrio.

Desesperada, la madre recorrió las calles del lugar hasta que luego de algunas horas, finalmente encontró a su hijo divagando por las inmediaciones, sin el dinero que llevaba para la compra (unos $2300), ni los celulares, por supuesto.

El delincuente fue visto horas más tarde en el Bº Siderca. Se moviliza en una Zanella roja, de contextura delgada y nariz prominente, detallaron las víctimas tras realizar la denuncia policial.

Al parecer, el sujeto habría participado de varios atracos en la zona, de similares características, por lo que advierten a los vecinos no acceder a este tipo de maniobras.